Hey, le dije, aunque conocía su nombre
no vuelvas a pedirme nunca más nada
no intentes escarbar en la arena vacía
inútiles serán los llamados
contestados con aire tus llantos
Te amo, le dije, aunque no lo sentía
y el cielo dejó ir a las nubes
envueltas por fin en llamas
como siempre las imaginamos.
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