martes, septiembre 30, 2014

en medio del bosque


"Los espíritus juguetones son una suerte de camuflaje."
- Pierre Pain -


Hoy, cuando desperté, los escuché conversar bajo mi ventana

LA LLUVIA NO SE DETENDRÁ

se animaban unos a otros
había sido una noche agitada, aún se oían los llantos

EL SILENCIO ES IMAGINARIO

-  a veces pienso que todas mis decisiones fueron erradas
que en el primer cruce de caminos, debí hacerte caso -

era cosa de darse cuenta no más, de abrir los ojos y poner atención
pero decidimos subir el volumen y tratamos de cruzar el bosque
sin ver luz alguna, sabiendo que nos perderíamos

NO QUIERO SABER DE TUS VICTORIAS

la tendencia indica que todo esto fue una broma

que debimos quedarnos a vivir en el bosque


volver al jardín

cómo no te iba a querer si me aceptaste sin preguntar nada
me quisiste tú a mí antes que yo a ti
aguantaste mis borracheras
                                            mis olvidos

mis malas caricias eran para ti regalos divinos
mi mal sexo mi mal aliento mis malos sueños

y entonces te quise
te quise como un enfermo
como no se debe querer a nadie en este planeta
olvidé los dolores y los sueños
eras el sol y el cielo 
los días y las noches de mis sueños olvidados
mi aliento empeoró                                olvidaba comer por estar enfermo
mi jornada laboral aumentó                   gastaba más en cervezas y libros

nadie me sacaba la sonrisa de la cara

escribía poco y nada         tenía pocas ideas

te gustaba ponerte bajo mi paraguas cuando llovía
sacabas una cucharada de cada una de mis comidas
hablaste como yo          te enamoraste tú también

se me ponían los ojos llorosos pero no me arrepentía
se me trababa la lengua siempre que hablaba de ti

no podía dejar de hablar de ti

me arropaste me abrazaste me cortaste el pelo me desnudaste
hacías como que me escuchabas cuando me daba por leer
yo no sé leer yo no sé hacer nada yo no se qué hago acá

casi siempre pensé que no te merecía
me quisiste tú a mí antes que yo a ti

                                                           tenías miedo

si mal no recuerdo fuimos felices y reímos mucho también

improvisamos muchas veces pero salimos airosos
nos acompañamos lloramos cantamos bailamos

nos metimos en tu cama con frío un millón de veces
yo estaba ebrio la mitad de esas veces
y tú me querías y yo te quería

las mejores conversaciones fueron muy tarde en la noche
tuvimos noches interminables te acuerdas

tus pies fríos ay tus pies fríos

vaciamos nuestros bolsillos y más tarde esa misma noche nuestros cuerpos
quedaron tendidos a la espera de la mañana

recuerdo que nos amábamos y no nos dejábamos
yo te ocultaba cosas               me escondía
me escondí tanto y tantas veces 
que ni yo me pude encontrar

yo creo que ya no me quieres
yo creo que estábamos equivocados

cómo no te voy a querer yo                
                                              cómo se te ocurre


no voy a ver nunca más un jardín tan bello
como tus piernas como tus lágrimas como tu sonrisa



Desapercibido s/n

Siempre llegábamos tarde a todas partes
no nos importaba llegar cuando se estuvieran yendo los otros
solo queríamos un poco de eso, un poco de esto otro
lo quisimos todo y quedamos sin nada
absolutamente nada.


Tu niebla

Si nos detenemos a pensar
nada puede ser tan malo
un ojo fuera de órbita no es nada
comparado con una mordida de perro
en la cara,
un corazón roto es un juego de niños
si lo ponemos palmo a palmo
con una puñalada por la espalda,
el olvido quizás parezca mortal
pero cuando lo vemos junto a la indiferencia
nos damos cuenta de las dimensiones.

Si nos detenemos a pensar
nada puede ser tan grave:
yo sigo acá, esperando que me escribas de nuevo
esperando olvidar tu espalda, tu historia,
tu nombre;
tú sigues allá, donde no llega luz ni llantos
y se respira apenas.

Nada puede ser tan grave:
un par de días y se me pasa

Qué pocos somos

Qué pocos somos
y cuánto ruido hacemos

Seguro hay más silencio en el hambre
más en las casas solitarias
y hasta más silencio ha de haber
en los ojos de un niño

Más silencio en las librerías
en los patios de colegio
en las calles inundadas
en una iglesia abarrotada

Ese silencio añoro
un silencio para no creerlo.

domingo, septiembre 28, 2014

Los dos tigres

Ni siquiera cuando eran seis los tigres
se podía hablar de seis tigres
ni siquiera se podía hablar

con suerte llorábamos
pensando en el futuro que venía