martes, diciembre 11, 2012

Paralelismos

Cuando todos se duerman
tu y yo
él y ella
viajaremos por los sueños
de todos los dormidos
visitando sus lugares secretos
riéndonos de sus imaginarios
y visitando a las personas
que actúan de nosotros
en los sueños de los demás

Piedritas

¿Y si no fuésemos seres humanos
sino piedritas 
que los niños patean 
para pasar el rato
cuando van de su casa al colegio
o viceversa
y a veces entraríamos a las casas
y nos sacarían con la escoba
o con la mano, volando

y si a veces nos arrojaran 
los otros niños, con rabia
con justificada rabia
y razón
fuerte, muy fuerte
contra ventanas o carros policiales
contra otros niños

o bien nos ignoraran 
pasaran por nuestro lado y no nos hicieran 
ni daño, ni cariño, ni una muestra
de conocimiento de nuestra existencia
y nos quedáramos ahí 
solos, o quizás con más piedritas
pero probablemente solos
mirándonos fijo
como siempre nos hemos mirado
aunque no seamos piedritas
y como seguramente nos miraríamos
fuésemos lo que fuésemos

acompañándonos, tú
a mi lado, yo
a tu lado y los dos pensando
por sobre todo 
en el espacio que nos queda 
por recorrer 
para estar por fin
realmente juntos?

Desapercibido VII

sin embargo, no pensé
que demoraríamos tanto en darnos cuenta,
tanto en mirarnos las caras
o dejar de mirarnos
y sentir que la pregunta no tenía respuesta

todo estaba.

El día que se robaron la Mona Lisa

El día que se robaron la Mona Lisa
el día que nació Jean-Michel Basquiat
el día que bombardearon Valparaíso
el día que una paloma me bombardeó la cabeza
el día que miraste el mar durante una hora
el día que hice el punto ganador de un partido
el día que las hormigas se comieron toda la pizza
el día que cayeron las Torres Gemelas
el día que la operación duró ocho horas
el día que vi ese pilar redondo
el día que rasqué con paciencia esa espalda
el día que nació Dylan Thomas
el día que empezó a sonar esa música
el día que estuve enfermo, sin lugar a dudas, y no sólo de insomnio
el día que mataron a Santiago Nasar
el día que desperté con olas en vez de pájaros
el día que empezó antes y terminó en llantos
el día que cantamos juntos una canción inventada
el día que robamos unos tragos en La Piedra Feliz
el día que nació la poesía
el día que inventaron la mentira
el día que los besos fueron una escalera
el día que murió Gonzalo Rojas
el día que no aguanté más y emití un gran alarido, un alarido largo de varias horas
el día que los padres no supieron nada
el día que comimos papas en el desierto
el día que cien muertos eran pocos
el día que el columpio
el día que la ciudad era de barro
el día que los piedrazos
el día que la bulla
el día que los recuerdos y las lágrimas
el día que los tragos y las carcajadas
el día que usaré corbata.

jueves, diciembre 06, 2012

El abismo II

El abismo entre tus palabras
y mis recuerdos
está para tirarse en tobogán
y morir en el intento

martes, noviembre 20, 2012

Desapercibido XI

Esto no es un exceso
por ningún motivo
es sólo una escapada
un descanso de tanta regla

me rehúso a acatar tus exigencias
que no son otra cosa que simples
caprichos propios de una niña
como tú

cabra chica, qué te has creído
mira que llegar aquí
a ponerme límites
a mí

quizás sí
fue demasiado

pero me niego a dejar de sonreír
cada vez que te vea despertar
a mi lado

Desapercibido V

Imaginar un escenario
menos propicio para decir te amo
es prácticamente imposible,
pero lo intentaré

hasta entonces.

el gran final



"Ah, un encargo:

si él llama nuevamente por teléfono
le dices que no insista, que he salido."


Alfonsina Storni.

Todo lo que puedo decir
ya se ha escrito
o se ha balbuceando entre llantos

no queda más que hacer
ni una canción urgente
ni un grito que dé paso al silencio

no quedan más días que recorrer

cadáveres con maletines hechos de otros cadáveres 
se mueven apurados de semáforo en semáforo
pareciesen ignorar sus pasados
negándose a que lo inevitable ocurra

ya no quedan ni calles que recorrer

haciendo la fila en bancos y en centros de pago
los cadáveres arrugan la frente
y se atreven a reclamar por la falta de tiempo

no hay caso, no hay caso

clavados en sus cruces
están los antiguos profetas
los que dijeron que este día no llegaría
o que llegaría sin pena ni gloria

(también están los futuros
profetas nacidos de probetas)

el final es inminente
pocos instantes nos quedan
no alcanzaremos ni a despedirnos
ni un beso ni un abrazo ni un adiós

no quedan luces en el cielo

la configuración de la noche nos distrae
y esperamos
sentados en la plaza
el principio del gran final


lunes, noviembre 12, 2012

Medidas estatales urgentes

necesitamos mejores empleos
del tiempo

que se declare urgentemente 
la extensión 
de los días de semana
 
veinticuatro horas pasan volando

que los atardeceres duren 
lo que duran los enamoramientos

que las lluvias tarden en nacer
y su adolescencia sea lenta

muerte súbita a las noches sin luna

la vida nos alcanza
cada vez más rápido

¿que qué quiero?

Una pieza oscura para mí solo
una noche fría y una botella de vino
un montón de perros que me sigan
una bicicleta antigua que me lleve
donde a veces voy en los sueños
un año de soledad un año de silencio
la opción de elegir sin culpa
un paseo en la madrugada
un regalo inesperado
una mascota de atroz mirada
un bolso con los libros viejos
con las mismas manchas
y el mismo polvo
que la ropa que llevo.

Almanaque, de Jaime Pinos

¿Por qué lo dejé en casa?
No pensé que lo necesitaría,
así de simple.

Y apenas se nubló el día
y cayeron las primeras gotas

de la suave llovizna 
me di cuenta de golpe.

Té verde

Te veré al final del día
te hablaré desde la cocina
besaré tus hombros
masajearé tus muslos

te hablaré desde la cocina
mientras miro los cerros oscurecer
lentamente
a espaldas del sol

pensaré un poco
en lo que no hice
durante el día

en el libro que dejé sin leer
los llamados que no atendí
a cuánto estamos
qué edad tenemos

qué nos espera mañana
qué dirán nuestros hijos
cuando sepan de estos días,
cuáles serán las calles que caminaremos a diario

gritaré un poco
muy poco,
más bien hablaré fuerte
pero no tanto:
quieres té normal
o té verde.

míseros amigos míos

el futuro sigue siendo incierto
bajo los puentes del mapocho

el gusto por observar la miseria
y no hacer nada al respecto
es pasión de multitudes

el imperio de la soledad
el imperio del insulto
el imperio de la barbarie
el imperio de las cacas de perro

digan lo que digan
no sobreviviremos
la próxima guerra

¡qué trágico desenlace!

jueves, septiembre 13, 2012

Saludo y descanso.

El sexo fue casual y más bien amistoso
la conversación fue rápida e interesante
la discusión fue acalorada y violenta
el beso fue aburrido y demasiado extenso
los sueños fueron oscuros y degradantes
la mirada fue directa y calculada
el desastre fue inminente y limitado
los culpables fueron torpes y lentos
el sexo fue intenso y sudoroso
el sexo fue silencioso y secreto
las heridas fueron eternas e inolvidables
el saludo fue indiferente y fingido
el baile fue íntimo y cercano
el descanso fue breve y cariñoso
el sexo fue desordenado y grandioso
no hubo despedida.

El abismo

El abismo sospecha de mí
y se multiplican los espacios
que me separan de tu calor.


miércoles, mayo 16, 2012

Los inútiles momentos

El animal se acostumbra al trabajo en equipo
aunque nace solo y muere igual, su vida entera gira
alrededor de otros animales.


Los lame, a veces. Los llama, los extraña.
Sus temores son mayúsculos
las noches de poca luna
y en temporadas de silencio, 
cree haber perdido el habla.


El animal se interpone en su propio desarrollo.


Muere con la ilusión de haber vivido bien, 
contando los buenos y malos momentos
riendo de buena gana, cuando no debería hacer más
que lamentarse por su vana vida.

Esa noche olvidé los colores

Como habrá sido esa noche
en que decidí que todo era fácil, 
que podía tomarme las preocupaciones
acompañadas de vino y risas.


Ensuciarme las manos era requisito
para poder tender un cigarro
prestado
a una niña en la mesa del lado.


Y cantar con voz de viejo
canciones viejas con gárgaras viejas
que pareciese que no se han cantado nunca
ni se acabarán.


Cómo habrá terminado esa noche
para los amigos del bar, para los alambres,
para los vasos plásticos en las escalas, 
para las insólitas y antiguas preocupaciones
que dejé olvidadas.

El abismo sospecha de las causas



El abismo sospecha de las causas
y de sí mismo.


Esa vez caminé y me deshice en disculpas,
frente al quiosco de diarios
del centro.


La vi sigilosa esperando a alguien
mientras sus piernas también esperaban
al viento de otros tiempos.



No me puedo quedar tranquilo
acá, tan lejos del recuerdo, si parece
que me fuera a aplastar.


El penoso abismo se disfraza a veces
de sombras y de silencios
y de comisuras húmedas
en labios tensos.

Iluminaciones de Mayo

Un hombre describe su muerte
en el banco de una plaza;
si tú supieras su nombre

si tú supieras los nombres
de las víctimas.


Urriola es un mundo imposible
de esos que te ayudan a despertar
inundando con sus lamentos 
las óseas sinfonías del terror.


¿Cuáles fueron esas leyes
de las que tanto hablas
y que se olvidaron?



lunes, mayo 07, 2012

El baile de todos

Caminar barrios inocentes al amanecer, esculpir
las cortinas aún cerradas de la memoria.


Una vez y otra más. La mueca ciega ganó la batalla.

Mira cómo se agrupan los colores

en torno a tu figura,
mira cuántos arrepentidos eligen
sus castigos,
desnúdate y olvida

los mapas gastados.


miércoles, enero 18, 2012

Día de sol

tanto sol en el día
acumuló calor las paredes
y en el piso

manchado de sol, no dejará de quemar
los nervios fuera de control.

no nos dejará huir, este calor,
moriremos acá, calcinados y pegajosos

por lo menos.

miércoles, enero 11, 2012

Empedernido

Es la noche quien nos recuerda
cubriendo nuestros rostros del frío:
el mundo entero en la punta de tu nariz.

Inútil, paseo mis manos por las tuyas
y los zapatos se gastan llorosos
en el ir y venir.

Asqueado, el nocturno invade
nuestro diálogo cotidiano
esperando hallarse entre las miradas
y las sonrisas.

Inútil, guardo mi silencio en una bolsita
y espero que el frágil deseo
se refleje en mis ojos.

Ojalá lo veas, pienso.
ojalá estudies mis pasos y renuncies
a las frases hechas,
ojalá palpes los muros del laberinto,
ojalá lo sepas antes que yo.



Desapercibido XIX

No saber qué es lo que dices
mientras intento adivinarlo.

hablas desde el descuido, buscando
tu propio reflejo en el vidrio.

y te miro desde tus ojos
y desde tu rostro
y desde tu misma muerte
y desde el bus.

hablas recién nacida, pronuncias
palabras cortas, sin inicios,
hablas desnuda y herida

A veces el amor
pasa desapercibido

Domingo

Respetar el tiempo allanado e
iluminar el rostro del silencio.

No sabemos reaccionar ante las carcajadas
y se pierden nuestros tiempos
a través de un último beso.

Viajaremos sin dar con los espejos,
inútiles recorridos y favores no concedidos.

tus raíces desatadas, obvias,
yacen ante el monumento de nuestra fe.