lunes, abril 26, 2010

Desapercibido X

Un día cualquiera
nada especial
la canción se hizo fuerte
el sillón tembló

la voz no dijo nada
y la mirada se quedó
pegada al piso

las caras siguieron tristes
aunque por fuera sonreían

los ojos volvieron y otra vez
no dijeron nada.

A veces el amor
pasa desapercibido.

Hacia el frente camino

Olvidé su nombre
y su número

Lo siento, me olvidé
sin querer de toda la historia
del tiempo aéreo
del camino claro

olvidé el ladrido de la huída
la semana tejida entre noches
muchos detalles de despedidas
casi cada rostro, olvidé.

La verdad es que quise
olvidar un poco
y me salió mal,
lo helado y lo tibio
murmullos sombríos
olvidé mañanas completas
olvidé.

Hacía tanto frío

Tenía tanto frío esa tarde
- y eso que había un sol
de mil demonios -
que tuve que abrocharme
entero
las comisuras de los labios
incluidas
y no pude decir
lo que iba a decir
por eso mismo estoy acá
para repetirme
frente al espejo
el discurso que tengo preparado
hace más de 20 años
y que no he tenido la opción
de presentar:

Señoras y señores,
hace tanto frío
que se me caen las palabras
entre los dientes.

Será el frío, pienso y les comento
a ustedes por si sufren
de algún mal similar.
Se me caen las
palabras.

No tengo nada más para decir

Perdidos y encontrados

Una mañana perdí el aliento
Se quedó debajo de la micro
La otra parte de mi persona
Estoy solo arriba de este árbol
¿Quién olvidó sus cartas?
Sabiendo que hacer, no lo hace
Olvídense de los poetas malditos
Aguanto la respiración hasta el último segundo
Sin querer, despierto.

viernes, abril 23, 2010

Afuera también hay asesinos

A veces creo que la noche se tiñe de negro
cuando la verdad es que nosotros somos
los que nos vamos tiñendo
de negro
de rojo
de todos los colores que observamos
una vez en la puesta de sol,
lo lamentable es que
no estuviste ahí esa tarde
para ver conmigo
los colores que realmente iban en las orillas
de la puesta de sol.

Nos vemos
antes del amanecer

domingo, abril 11, 2010

Iglesias vacías

Y dónde están todos
entonces
dónde se fueron a esconder

ni este techo de cuatro metros
les da seguridad.

cuidado
que la cruz no está
apernada a la pared.

lunes, abril 05, 2010

Con velocidad

A las tormentas
enfrentar
aguantando la música
sobre los hombros

quemar los libros
en plena lectura

volver a cerrar
las puertas del impulso

no temer al silencio,
de frente a la muralla
en pleno derrumbe.

gastar los adoquines
como renunciando al tiempo.


domingo, abril 04, 2010

Salió de la casa y qué

Dudó por horas
las ventanas cerradas
y las cortinas corridas
puertas con llave
gas, luz y agua
cortados con firmeza
escondidas sus cosas
privadas, más privadas
el agua recién hervida
en el termo, lista.
Dudó por horas.
Abandonar su castillo en ruinas
o quedarse para siempre

Qué haría
Le faltaría el aire
Agua y sol
terminarían por desesperarlo
Mucho polvo, pensó
mucha gente.
Siempre puedo cruzar la calle
y tomarme un buen trago - se dijo
en la fuente de soda
que lleva su nombre.

Salió de la casa
y qué.

Otra noche

Anochecerá
y la oscuridad casi cubrirá
por completo tu sombra.

Achicaré mis ojos
para no perderte de vista.

sábado, abril 03, 2010

Ciencia exacta

La invención de la belleza
la carnalidad de amanecida
explotando las alas en el aire
veo cristales cobrando vida.

Espejo de arrepentimiento
sobre tu corriente juiciosa
mancha el cielo la verdad:
la poesía por fin reposa.

Ciencia exacta de jugarreta
aluvión de golondrinas
tirita aullando la poesía
es errar o vivir, la misma ruina.

jueves, abril 01, 2010

Lo que queda

Lo que queda son los muertos
las respiraciones son inútiles
los cajones son para siempre
engorrosa es la esperanza.

Lo que queda es el recuerdo
de los finales de las noches,
apagados en lo ausente
los sueños simples de matanzas.

Lo que queda son las risas
y los surcos en las manos,
maquinando en perpetua procesión
hilando frases de costado.

Lo que queda es lo imaginado
la ventana que da al patio del caos,
accidentes al alba, gritos frágiles
desnudando los camastros.

Lo que queda son mentiras
horas por cumplir, sillas vacías
llamados poéticos al aire
ceños fruncidos que aguantar.

Lo que queda es uno mismo
sin peso y con apenas carne
muerto de hambre de años
rugosas manos, lector de abismo.

Lo que queda es la única muerte
no los vivos ni los dolientes
ni siquiera la carroza que se deshace
con el cariño de las floristas
lo que queda es sólo la vista
ahogada en perdones mala clase
la única muerte escondida
partitura de las noches vacías
en que las sombras son compañía
y del temor a vivir nace la vida.

Mago

En las orillas de lo necesario
está tu imagen
y lo que representa
que no eres tú
que no serás tú

que de la rabia
es solo fracción,
del deseo
es la risa nerviosa.

Llegado el momento y
fatigado, gritaré en el oído
del mundo: ¡Hoy sé!