Las ratas corrían en fingido silencio
en el piso de arriba
faltaban más de dos horas
para que levantara el sol
y aún más para saber de ti
una docena de rostros
un centenar de libros
cerros de ropa sucia
dos bolsas de té
secándose.
martes, diciembre 09, 2014
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario