"Ah, un encargo:
si él llama nuevamente por teléfono
le dices que no insista, que he salido."
Alfonsina Storni.
Todo lo que puedo decir
ya se ha escrito
o se ha balbuceando entre llantos
no queda más que hacer
ni una canción urgente
ni un grito que dé paso al silencio
no quedan más días que recorrer
cadáveres con maletines hechos de otros cadáveres
se mueven apurados de semáforo en semáforo
pareciesen ignorar sus pasados
negándose a que lo inevitable ocurra
ya no quedan ni calles que recorrer
haciendo la fila en bancos y en centros de pago
los cadáveres arrugan la frente
y se atreven a reclamar por la falta de tiempo
no hay caso, no hay caso
clavados en sus cruces
están los antiguos profetas
los que dijeron que este día no llegaría
o que llegaría sin pena ni gloria
(también están los futuros
profetas nacidos de probetas)
el final es inminente
pocos instantes nos quedan
no alcanzaremos ni a despedirnos
ni un beso ni un abrazo ni un adiós
no quedan luces en el cielo
la configuración de la noche nos distrae
y esperamos
sentados en la plaza
el principio del gran final